Un día, una mujer descubrió restos de comida en la puerta de su casa.
Al principio, pensó que era una broma, pero cuando un policía le explicó lo que significaba, la sorpresa fue grande.
Maria Celino-Straker, de Manchester (Reino Unido), tuvo la desagradable sorpresa de encontrar restos de comida en su puerta.
Alguien había lanzado una lata de frijoles rojos en el umbral de su casa, y cuando lo vio, la mujer pensó que un niño o un joven del vecindario había hecho una broma.
Sin embargo, un policía explicó que detrás de tal gesto podría haber una explicación que pocos habrían pensado.
Cuando escuchó de qué se trataba, la mujer se sorprendió aún más.
Una mujer encontró restos de comida en la puerta de su casa, y un policía explicó lo que eso podría significar.
Un día, cuando regresó a casa, Maria Celino-Straker de Manchester vio que alguien había lanzado una lata entera de frijoles rojos a su puerta.
Como era de esperar, el descubrimiento le dejó un sabor amargo y se preguntó por un momento si un niño o un joven del vecindario quería „vengarse“ o divertirse haciendo una broma.
La mujer británica limpió, pero no pudo olvidar tan fácilmente lo que había sucedido.
Más tarde, mientras hablaba con un pariente (que resultó ser un ex policía), le contó lo que había pasado.
Cuando el oficial de la ley escuchó los detalles del incidente, explicó que no se trataba solo de un gesto de puro placer, sino más bien de una señal muy seria.
Según los detalles revelados por el ex policía, los restos de comida u otros objetos que se dejan en la entrada de una casa pueden ser una señal clara de que un ladrón ha puesto su ojo en la casa.
Para asegurarse de que los propietarios estén fuera, el delincuente monitorea si la basura o los objetos dejados allí son retirados.
De lo contrario, el ladrón actúa sabiendo que no hay nadie en casa.
Asustada por lo que había descubierto, Maria Celino-Straker decidió compartir este detalle con sus seguidores en Facebook.
A través de una publicación, la mujer contó lo que le había sucedido y lo que había aprendido de la policía para advertir a otras personas sobre un posible peligro.