La reconocida actriz, que interpreta a una ama de casa que tiene un miedo subyacente de transformarse en un perro, lucía muy alejada del glamour de Hollywood en su llamativo y extravagante disfraz.
Durante la filmación de escenas para la película en Los Ángeles, fue vista sin maquillaje y con unas sandalias Birkenstock marrones, para complementar su personaje.
El guion requería que mostrara sentimientos de culpa después de abofetear a su coestrella Scoot McNairy.
Ella realizó esta acción con una expresión de arrepentimiento mientras se enfrentaban y se tomaban de las manos.
Las cámaras capturaron cada momento.
Su atuendo poco convencional, que consistía en una blusa a rayas y pantalones holgados, se alejaba notablemente de los típicos conjuntos de alfombra roja que normalmente se asocian con una actriz de su calibre.
Aunque la escena no mostraba signos de ira, su nerviosismo era palpable mientras se preparaba para este momento decisivo en la historia.
Su ansiedad comenzó a desvanecerse a medida que el agarre tranquilizador de su colega la estabilizaba, permitiéndole concentrarse en una actuación convincente.
Ella Thomas y Garrett C. Phillips están en el centro de una película que explora la transformación de una ama de casa suburbana en una cuidadora a tiempo completo para su hijo.