LAS PRIMERAS PALABRAS DE MI HIJA NO FUERON ‘MAMÁ’ NI ‘PAPÁ’—CUANDO FINALMENTE HABLÓ, DIJO UN NOMBRE QUE NINGUNO DE NOSOTROS CONOCÍA

Emma llevaba meses balbuceando, y Liam y yo esperábamos con ansias sus primeras palabras.

Cada vez que hacía un sonido, nos emocionábamos, pero nunca parecía ser “Mamá” o “Papá.”

En su lugar, eran solo pequeños ruidos, risitas y gorjeos que no tenían mucho sentido.

Había soñado durante tanto tiempo con escuchar “Mamá” salir de sus labios, así que cuando finalmente habló, no estaba preparada para lo que dijo.

Ocurrió en una tranquila tarde, justo después del almuerzo.

Liam y yo estábamos sentados en la sala de estar, y Emma jugaba en el suelo con sus juguetes.

Yo estaba en la cocina limpiando cuando lo escuché claramente desde el otro lado de la habitación.

“Zara.”

Me quedé paralizada.

No creí haberlo escuchado bien.

Liam me miró con los ojos abiertos de par en par, y luego ambos nos giramos para mirar a Emma, que seguía sentada jugando, completamente ajena al revuelo que acababa de causar.

“¿Acaba de decir ‘Zara’?” pregunté, con incredulidad en mi voz.

Liam hizo una pausa, mirando a Emma.

“Creo que sí,” dijo lentamente.

“Pero… no conocemos a nadie llamado Zara, ¿verdad?”

Negué con la cabeza, confundida.

No tenía sentido.

Ni Liam ni yo habíamos hablado jamás de alguien llamado Zara.

No recordaba haber oído ese nombre antes en ninguna de nuestras conversaciones, así que ¿de dónde lo había sacado?

Pasaron algunos días, y de vez en cuando, Emma lo decía de nuevo—“Zara.”

No era como si lo estuviera diciendo para alguien en particular, solo repetía el nombre al azar.

Pero cada vez que lo hacía, no podía deshacerme de la sensación de que había algo significativo en ello.

Decidí llamar a mi madre para pedirle su opinión.

Tal vez era un nombre que ella conocía, o quizás había escuchado algo que pudiera explicarlo.

“Mamá, Emma sigue diciendo ‘Zara,’” dije, tratando de sonar relajada.

“¿Conoces a alguien con ese nombre?”

Hubo una breve pausa al otro lado del teléfono, y luego escuché a mi madre reír suavemente.

“¿Zara?

Bueno, no, no conozco a nadie con ese nombre,” dijo.

“Pero, ¿recuerdas el fin de semana pasado cuando estuve cuidando a Emma?

Estuvimos viendo ese programa infantil juntas.

Ese con todos esos pequeños personajes.”

Me quedé pensativa, con la mente acelerada.

“¡Oh!

¿Te refieres al que tiene una niña con una amiga llamada Zara?”

“Sí, ese mismo,” respondió mi madre, sonando divertida.

“Estoy segura de que escuchó el nombre ahí.

Los niños aprenden muy rápido, y probablemente lo está repitiendo porque le gustó.”

La revelación me golpeó como una tonelada de ladrillos.

Emma había escuchado el nombre “Zara” mientras veía un programa infantil con mi madre.

El programa tenía un personaje llamado Zara, y Emma debió haberlo aprendido de ahí.

Era una explicación tan simple, y sin embargo, había pasado días dándole vueltas.

Reí suavemente para mí misma.

“No puedo creer que no se me ocurriera,” le dije a mi madre.

“Seguramente solo le gustó cómo sonaba.”

“Eso debe ser,” coincidió mi madre.

“El cerebro de los niños es como una esponja.

Escuchan algo, y se les queda grabado.

Pero es algo tierno, después de todo.”

Después de esa conversación, sentí un gran alivio.

No había ningún misterio profundo detrás, ni significados ocultos o conexiones desconocidas.

Emma no estaba llamando a alguien que no conocíamos; simplemente había aprendido un nombre de un programa infantil.

Era así de sencillo.

Desde ese momento, cada vez que Emma decía “Zara,” sonreía.

Seguía siendo sorprendente escucharla decirlo, pero ahora todo tenía sentido.

Había aprendido el nombre de algo tan inocente como un programa de televisión, y me hizo reír lo fácil que es sobreanalizar las cosas cuando se trata de la crianza.

Al final, las primeras palabras reales de Emma no llegaron como lo había imaginado.

Pero aun así, marcaron un hito que siempre recordaría.

Y aunque “Zara” no era el nombre que había esperado, era solo otra señal de que mi pequeña estaba creciendo y descubriendo el mundo a su alrededor, una palabra a la vez.

Mit deinen Freunden teilen