Con su gesto, una joven de 21 años llamada Shelby Hennick captó la atención de todo el mundo.
Fue valorada por el acto de bondad que tuvo hacia su abuela enferma.

La abuela de Shelby estaba en el hospital en estado crítico debido a problemas pulmonares.
Aunque estaba consciente, se sentía incómoda y su salud no era nada buena.
Sin embargo, lo único que la ayudaba a luchar contra la enfermedad era la añoranza por su perro, Patsy.
Como en el hospital donde estaba internada no se permitían animales, la abuela se sentía muy decepcionada y triste por no poder ver a su perrito.
Entonces su nieta ideó un plan ingenioso y creativo.
Shelby tomó al perro de la casa de la abuela y lo envolvió en una manta.
El viaje en auto ayudó a Patsy a calmarse y quedarse tranquilo bajo la manta, aunque al principio estaba muy inquieto.
Shelby, siendo veterinaria, supo cómo tranquilizarlo.
Shelby entró confiada al hospital, llevando a Patsy cubierto por la manta.
Todos supusieron que debajo de la manta había un bebé, no un perro escondido.
Cuando Shelby entró a la habitación, la abuela quedó sorprendida.
No sospechaba nada.
Pero cuando Shelby retiró la manta, la alegría de la abuela al ver a su querido perro la dejó sin palabras.
Era todo lo que necesitaba.
Su historia, compartida en Facebook, inspiró a otras personas.
Alguien dijo que hizo lo mismo por su abuelo en el hospital, aunque fue más difícil pasar desapercibido.
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